Quién me iba a decir que acabaría yendo a un concierto de este chico con un montón de espanyoles de mi empresa: todas chicas menos el pobre Xavi, que ha estado estupendamente en su papel de "gallo del corral"), saltando y gritando guarrerías a gritos, como una quinceanyera ... en fin ...
Quién me iba a decir que, después de 8 anyos odiando el Oktoberfest (fiesta de la cerveza en Munich, conocida mundialmente y de la que huyo como puedo tras una primera experiencia traumática) acabaría comprándome un Diendl (trate típico) que resaltaría aún más mi ya de por tí acentuada delantera.
Quién me iba a decir que después de 8 anyos mi amiga Libélula por fin vendría a verme, trayéndose al Jorge el Osezno, y coincidiendo con el Oktoberfest. Quién le iba a decir a ella que iba a ligar no con un ALemán (como ella esperaba) sino con un ALmeriense y que revolucionaría a todos mis amigos, jejeje ... experiencia única.
La verdad es que últimamente los acontecimientos se suceden vertiginosamente, de modo que no he tenido demasiado tiempo para actualizar. Tengo tantas cosas en la cabeza que se me van quedando anticuadas antes de que pueda soltarlas. En fin, que prometo sentar un poco la cabeza y pasar más a menudo por aquí. De momento intento aprovechar esta sutil ola de moviemiento, a ver si de paso pierdo algunos kilitos, jejeje
Vaya, vaya, qué celosa de la intimidad de los demás, jeje.
Dos cosas he de decir: no sólo ella quería ligar un alemán y, al menos, ella ligó... sé de uno que no se comió na de na.
Besos, guapa
Ambrosio, ambrosioo... qué bien, qué bien!